Ensayo sobre la Felicidad

Indagando sobre la fórmula de la felicidad, concluí que la fórmula para alcanzarla es inconstante. Varía, se reinventa, se transforma y hasta parece inalcanzable. 
A veces llega con el viento, como el clavel del aire, o la encontramos escondida, creciendo en la sombra. Otras, se abre camino como esquejes, desprendiéndose de la ruta originaria.
De nosotros depende, que eche raíces, que aún cuando el entorno parezca esteril, la felicidad encuentre vestigios donde sostenerse, instalarse y crecer. 
Estos son algunos registros de una felicidad suspendida en el tiempo, alimentada del aire, del agua...





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